"Hoy un tal Martín Barboza me devolvió la billetera con documento y todo lo demás (200 míseros pé y la sube). Me la trajo a casa, mientras hervía un guiso en mi cocina... 'Usted es Torres?' Me preguntó un descocido a quien una moto y una minursi esperaban en la calle. 'Le devuelvo su billetera' me dice el pibe. Yo que ni me había dado cuenta, recibí el regalo de la sonrisa del boncha, con la culpa de no tener cómo devolverle en algo semejante gesto de belleza. 'Yo se la devuelvo porque en mi casa es así, somos todos gente así' me dijo el flaco y me dejó agradeciéndole mil veces a la estela de luz que dejó en la avenida", publicó en su cuenta de la red social.

El martes a las 9 de la noche, este escritor, electricista y estudiante de Letras (según él mismo se define) había regresado de buscar a su hija de 8 años de danza, cuando tocaron a su puerta y un joven de unos 24 ó 25 años, llamado Martín Barboza, le devolvió su billetera, que hasta ese momento él no se había percatado de haberla extraviado.