La producción de carne bovina en Argentina escaló 5,4% en comparación con el nivel de un año antes, a alrededor de 214.000 toneladas, de la mano de un alza en el nivel de faena y en la tasa de hembras enviadas al matadero, comunicó la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados.
Ciccra destaca en su informe de mayo que la cantidad de ejemplares faenados en el cuarto mes del año subió 5,3%, a cerca de 951.000 cabezas.
En el primer cuatrimestre del 2017 la tasa de hembras faenadas creció 2,2% con respecto a igual período del 2016, a 42,2%, una proporción que se mantiene alejada de revertir la nueva etapa de recomposición del rodeo, está a un ritmo de un millón de cabezas por año.
"El proceso de recuperación de la actividad frigorífica vacuna continuó durante abril, aún a pesar de la menor cantidad de días hábiles registrados con respecto a marzo pasado y abril de 2016", informó Ciccra.
A su vez, Ciccra informó que entre enero y abril el consumo promedio de carne bovina por habitante fue de 56,7 kilogramos por año en Argentina, un 3,1% por encima de la cifra del mismo período del 2016.
Con respecto a las exportaciones, la cámara dijo que, de acuerdo al ente oficial de sanidad Senasa, en marzo los embarques de carne bovina crecieron a su mayor nivel mensual en seis años, a 16.903 toneladas.
Aumento del stock ganadero
Las hembras son la variable de ajuste que sostiene o incrementa el rodeo, por lo que su tasa de faena es vital para la conservación de los rodeos y es vigilada de cerca por el sector cárnico.
El sector considera como necesaria sostener una tasa inferior al 43% de la faena total para sostener el nivel de existencias, de ahí que con el nivel actual se considera que no está amenazado el proceso de aumento del stock ganadero.