La Prefectura de Formosa secuestró cerca de 8 millones de pesos en mercadería ingresada al país sin el correspondiente aval aduanero, 9 kilos de marihuana por un importe de 150 mil pesos y cigarrillos por un monto superior a los 250 mil pesos.
Tras la requisa del cargamento de un camión, que demoró tres días, se secuestraron 156 encomiendas cuyos productos están valuados en aproximadamente 8 millones de pesos, más de 250 mil pesos en un cargamento de cigarrillos y 9 kilos de marihuana distribuidos en 11 paquetes con un importe total de casi 150 mil pesos.
"El viernes, personal de Inteligencia criminal y de guardia y patrullaje de la dependencia interceptó un vehículo camión semirremolque perteneciente a una empresa de encomiendas con la presunción del traslado de mercaderías ingresadas al país de forma ilegal y de la posibilidad de la presencia de estupefacientes", dijo el prefecto principal Raúl Pascal en conferencia de prensa.
Tras el control del camión, se pudo constatar el ingreso de mercadería a territorio nacional sin aval aduanero proveniente de diversos lugares: China, Japón, Tailandia, Taiwán, Alemania, Canadá, Estados Unidos e Italia. "Se trata de mercadería muy costosa sin aval aduanero, es decir no tributan impuestos. La ganancia de quien se dedica a esta actividad está precisamente ahí, en hacerle llegar a un comprador lícito quizás, una mercadería que no pagó los impuestos que le corresponden al país", indicó.
Señaló que al dedicarse la empresa al traslado de encomiendas y de un vehículo semirremolque con gran capacidad, es necesario "ser prolijos y cautos y tomarse las cosas con seriedad. Hacer los controles sin dañar todos aquellos efectos que se envían bajo encomienda de forma legal".
Droga
Así también, informó que el can "Mia", con el que cuenta la Prefectura de Formosa, detectó que dentro de uno de los embalajes que contenía una cocina de industria paraguaya, estaba oculta una sustancia que luego se comprobó que era estupefaciente. El contrabando se encontraba dentro de la estructura metálica donde había acondicionado un espacio para el transporte de estupefacientes simulado con prendas embebidas en alguna sustancia para no ser olfateado rápidamente. "El trabajo del can fue fructuoso en ese contexto y se logró proceder al desarme y en la parte superior, en las hornallas, presentaba 11 envoltorios rectangulares envueltos en cinta de embalar característico de la sustancia conocida como marihuana. El peso de este estupefaciente superó los 9 kilos", explicó.