En tiempo de descuento para el cierre de listas, el ex ministro de Interior y Trasnporte Florencio Randazzo le confirmó a su entorno que no bajará su precandidatura a senador por el Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires, quedando cada vez más lejos la posibilidad de un acuerdo con el kirchnerismo y el massismo.

Cerca de las 12 del mediodía, los doce intendentes bonaerenses que forman parte del espacio se reunieron con Randazzo en el Palacio Raggio. La mayoría respaldó al ex ministro como lo habían hecho en los últimos encuentros. Además, escucharon de su boca los detalles de la reunión con Cristina Kirchner en la noche del viernes.

De ese grupo, una minoría le pidió rever la estrategia electoral y unir fuerzas con el kirchnerismo. Buscaron convencerlo para que trate de llegar a un acuerdo con la ex presidente y así lograr la unidad del peronismo en las últimas horas del día . El intento fue en vano. El ex ministro les confirmó que será candidato a senador nacional por el PJ, tal como se los había anticipado en los últimos encuentros que habían tenido.

Randazzo les contó a los jefes comunales que no había quedado satisfecho con el resultado de la reunión que mantuvo con la ex mandataria. Les dijo que solo le había ofrecido un cargo a él - segundo candidato a senador o primer candidato a diputado - pero que el resto de su armado político quedaba afuera del esquema del Frente Ciudadano.

El jefe comunal de San Martín, Gabriel Katopodys, fue quién tomó la voz y respaldó la candidatura del ex ministro frente a quienes le pedían bajar su candidatura a senador y llegar a un acuerdo con el kirchnerismo. Fue un apoyo consistente en un momento de tensión.

Una vez que finalizó la reunión con los líderes municipales, el ex ministro expuso su convicción de ser candidato en su cuenta de Twitter. "Voy a CUMPLIR con mi palabra", escribió. El mensaje, en el que resaltó con mayúscula el nombre de su espacio, fue una clara señal de confirmación. Las mismas palabras había utilizado el viernes por la noche cuando se sentó frente a Cristina en el departamento que tiene la ex jefa de Estado en Recoleta.