"Los centros de detención utilizados no tienen baño privado, no hay agua por tubería, dependes de cisternas y no hay higiene. Ha habido brotes de sarna e infecciones vaginales", denunció Andrés Colmenares, de Funpaz. Además señaló que, la semana pasada, 40 presos en el destacamento Conas Tiuna estuvieron obligados a dormir en la fosa de una piscina sin terminar.
Por otra parte, las ONGs destacaron que los presos por manifestarse comparten las celdas con criminales comunes. "En el Rodeo 2, por ejemplo, el riesgo de muerte es alto porque hay motines. En Tocuyito llegamos a tener 4 presos por las protestas en un lugar tan pequeño que solo uno podía estar de pie a la vez", explicó Colmenares.
Para Joel García, de Fundeci, el peor de los centros de detención preventiva en Caracas es la Zona 7, de Boleíta. "Es horroroso, le dicen el inframundo". El especialista describió que el lugar es un "sótano" y que se produjo una epidemia de sarna y afecciones respiratorias. Otro de los edificios en el ranking es el Helicoide, donde hay un espacio llamado "Guantánamo" que alberga 50 personas y tiene un solo baño. "Aunque el juez lo ordene, no hay traslados a los centros de salud. Hasta los detenidos son dejados dentro de los camiones porque ya no tienen lugar en las celdas", agregó García.
Mientras tanto, el Comité de la ONU contra la Tortura anunció el viernes pasado que pedirá al gobierno chavista una reunión para tratar el "deterioro de la situación" y solicitar un informe urgente frente a las denuncias. El Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, ya había alertado que en Venezuela hubo "un claro patrón de uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes".