Personal del grupo Comandante Fontana, dependiente del Escuadrón 5 "Pirané" de Gendarmería Nacional, secuestró más de 385 kilos de marihuana, que estaban enterrados en una zona de monte en el departamento Patiño.
Los gendarmes hallaron la droga durante un patrullaje sobre la ruta nacional 95, a la altura de la cabecera sur del río Tatú Pire, donde divisaron una bolsa de nylon atada a un poste de luz, lo que comúnmente es utilizado para marcar o señalar un terreno entre los narcotraficantes.
Inmediatamente, el personal de la fuerza rastrilló el lugar hasta localizar una zona boscosa ubicada a 140 kilómetros al oeste de la capital provincial y detectó 20 bolsos enterrados entre los pastizales.
Tras el hallazgo, intervino la Justicia Federal, que ordenó la requisa de las bolsas, que contenían 385,539 kilos de marihuana fraccionados en 504 "ladrillos".
Metodología
Fuentes de la investigación dijeron que se trata de "mulas que dejan la marihuana, que luego es recogida y transportada por otros integrantes de bandas locales" y recordaron que "una semana atrás se detectó una maniobra similar con 151 kilos de marihuana" en la provincia.
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