La familia Ledezma, propietaria de la Reserva Ecológica Paí Curuzú, ubicada entre las localidades de El Espinillo y Buena Vista, conocida por su belleza natural y por ser un complejo atractivo en todas su dimensión, recibió el pasado 16 de octubre la confirmación del Banco Nación de que este miércoles a las 9.30 irán a remate por una deuda con esa entidad crediticia.
En diálogo con La Mañana, Rubén Ledezma, hijo del propietario, comentó que "ya salió el edicto publicado y lamentablemente, el esfuerzo de mis padres, de 45 años en la zona, de armar el lugar de a poco, parece que terminará así".
Durante la entrevista, Ledezma se mostró más que sensibilizado al recordar que "el 18 de octubre falleció mi madre y ese mismo día recibimos la llamada telefónica del Banco Nación informándonos del remate. No pudimos pagar una deuda que teníamos porque ya veníamos mal, desde hace varios años que venimos en déficit. Sufrimos un tornado una vez y luego caída de granizo. El año pasado volví a levantar un módulo más o menos grande porque me dedico a las plantas ornamentales y con eso sobrevivíamos".
"Mi padre sigue conmigo pero es indescriptible el momento que está pasando, y yo estoy absorbiendo todo porque estoy las 24 horas con él. En estos momentos él se encuentra en un pozo depresivo y no quiere comer. Es muy feo lo que estamos pasando porque ellos comenzaron con este sueño hace 45 años. Desde ese entonces comenzaron con el parquizado con palmeras de distintas variedades a orillas de El Porteño que pasa por el medio del parque y de los dos lados plantaron palmeras y otras variedades arbóreas, que hoy son plantas grandes que están dando semillas y cada año está más lindo el lugar", relató a este matutino.
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