El fundador de Facebook , Mark Zuckerberg, no se presentará frente a los diputados británicos de la comisión de Cultura, Digital y Medios para responder sobre el escándalo de los datos personales de 50 millones de usuarios de la red social usados al parecer con fines de propaganda política, también en Gran Bretaña.
Se supo hoy al margen de la audiencia de Christopher Wylie, el hombre que reveló el caso tras haber trabajado en el pasado para Cambridge Analytica, la consultora acusada de haber comprado esos datos sin el consenso de los interesados.
Zuckerberg había sido requerido para intervenir personalmente en una carta enviada por el presidente de la comisión, Damian Collins, para aclarar las "incongruencias" imputadas a sus colaboradores en audiencias previas.
Pero el fundador de la red declinó la invitación, ofreciendo enviar en su lugar al jefe de tecnología de Facebook, Mike Schroepfer, y al jefe de producto Chris Cox.