No llegó -por razones desconocidas- el kirchnerista Marcelo Fuentes, aunque "se hubiera sentido cómodo", según definió el propio presidente provisional del Senado, Federico Pinedo.
Invitados por el jefe de gabinete Marcos Peña y el ministro del Interior Rogelio Frigerio, los senadores opositores aprovecharon el almuerzo en el Salón de los Científicos de la Casa Rosada para criticar duramente al Gobierno en dos temas centrales: los "mega DNU" firmados por el presidente Mauricio Macri y los sucesivos aumentos de tarifas que según un senador participante "complican" el escenario económico. A la salida, tanto opositores como oficialistas coincidieron en la necesidad de buscar un "mecanismo para blanquear" los ingresos de los senadores como modo de saltear la polémica que vive la Cámara de Diputados en relación al canje de pasajes aéreos por dinero.
"Se habló de fortalecer el diálogo institucional, con el compromiso de no favorecer la emisión de DNU", dijo el presidente del bloque peronista, Miguel Pichetto. Pinedo reconoció que ese había sido uno de los puntos críticos del almuerzo, que duró una hora y media y en el que se debatieron "a agenda abierta" distintos temas. Pero prefirió destacar que "hubo un espíritu positivo" en la reunión y prometió más consenso a la hora de aprobar una ley. "Quedó claro que el Poder Ejecutivo no va a presionar al Congreso para que salga tal o cual ley" dijo el presidente provisional, y habló de "mecanismos" para no tener que llegar a que las leyes salgan por decreto.
Todo había comenzado con sonrisas y relax. Pasadas las 13, ingresaron juntos por la explanada de la calle Rivadavia Pichetto-que conversaba con Fernando Pino Solanas (Proyecto Sur)-; el salteño Juan Carlos Romero (PJ-Salta); Luis Naidenoff (UCR-Formosa); Adolfo Rodríguez Saá (PJ San Luis), Guillermo Pereyra (MPN-Neuquén), Magdalena Solari (Bloque Misiones), Ada Iturrez (Frente Cívico Santiago del Estero), Daniel Lovera (PJ-Salta). Faltaron Fuentes (Frente para la Victoria-PJ) y el radical chaqueño Angel Rozas, de viaje.
En el Salón de los Científicos los esperaban Peña, Frigerio, la vicepresidenta Gabriela Michetti y la secretaria de relaciones políticas y parlamentarias, Lucía Aboud, además del bloque Pro, Humberto Schiavoni.
Pichetto y Solanas-que también hablaron con la prensa-coincidieron en que el almuerzo (burrata, lomo con salsa criolla y frutas fileteadas de postre) fue un "buen gesto" del Gobierno. El cineasta, de todos modos, tampoco se privó de criticar el "excesivo endeudamiento" en el que "ha incurrido el oficialismo".
La defensa que los senadores hicieron de un "mecanismo para transparentar" sus ingresos desembocó en un inesperado enojo de Pichetto. Al salir, un periodista le preguntó si pretendía equiparar el salario de los senadores con los jueces de la Corte. "Pibe, no lees los diarios, me voy", se enojó el senador rionegrino, aunque a los pocos pasos se volvió a contestar más preguntas. De todos modos, Pichetto aclaró que no estaba de acuerdo con las críticas del presidente Mauricio Macri al canje de pasajes aéreos por dinero. "Yo tengo otra visión", dijo Pichetto antes de enojarse.
"Fue una buena reunión de corte institucional", resumieron en el Ministerio del Interior, y minimizaron las críticas.