Blanca Haydée Sosa es una reconocida docente, pintora y vecina de la ciudad de Formosa. En diálogo con Cronopio, la autora dijo que no se considera "ni escritora ni artista", y agregó: "Yo me considero una osada, una persona que se atrevió a hacer algunas cosas, para las cuales no estaba preparada. Una poesía dice: 'Caminante no hay camino, se hace camino al andar'; y yo aplico eso para mí. Hay que atreverse a hacer cosas; y es bueno equivocarse, porque uno aprende de eso".

Luego, Sosa aclaró a este Suplemento su manera de ver la actividad artística. "No todo lo que se hace es arte. Hay que conocer qué significa la literatura, y en términos generales, saber a qué se le llama 'arte'. El hecho de vivir implica un arte. Existe el 'arte de vivir'. Quien no entiende que vivir es un arte, no comprende qué es el arte", afirmó.

"Hoy en día, existen personas que se consideran a sí mismas artistas, o escritores. Yo creo que esos 'títulos' los pone la población, el lector. Aun cuando no sepan nada de literatura o de otras ramas del arte, hay un punto en el cual 'el ojo' tiene mucho que ver. El grado de comprensión que nos acercan la visión y el raciocinio que poseemos todos nos dice si la cosa es válida o no tan válida. No me gusta hablar de antítesis, porque tampoco pienso que 'lo blanco es siempre blanco y lo negro es siempre negro'. Hay un punto en que ambos tonos se tocan, que no es la 'zona gris'", especificó.

"Conozco a unas cuantas mujeres que se animaron a hacer algunas cosas, como Margarita Diez, Blanca Salcedo, María Nucci y otras más. Creo que animarse tiene que ver con lo que cada uno piensa de sí mismo y de la vida que quiere. El hecho de vivir es una osadía, y transitar las 24 horas del día necesita del atrevimiento. Es algo que les pasa a todas las personas", añadió.

Por último, Blanca Sosa opinó que no debería cambiarse la denominación del "Día del Escritor" para contemplar la perspectiva de Género, y detalló: "Yo vengo de una formación 'antigua'. A mí no me fastidia el empleo del masculino para designar a todos. Me parece una discusión bizantina. Si algunas personas proponen cambiar el nombre del día, no tengo ningún problema con que lo hagan y me considero 'fuera del gremio'. Pero no pienso que le agregue ni le quite nada a nadie. Creo que se ofende más a la mujer cuando se la trata peyorativamente que cuando se generaliza a través de un artículo. Puedo estar tremendamente equivocada, y que haya mujeres que necesiten que las escritoras sean mencionadas, pero no sabría decir si existen personas que sienten eso".