El presidente electo de Brasil Jair Bolsonaro ratificó este jueves su apoyo a Israel, a la vez que su hijo Eduardo celebró el voto del país sudamericano a favor de la condena del grupo terrorista Hamás, una propuesta de Estados Unidos que fue finalmente rechazada por la Asamblea General de la ONU.

Bolsonaro, quien ha expresado en repetidas ocasiones su admiración hacia Israel, al que tiene como modelo, publicó en Twitter una simbólica foto frente a la Puerta Dorada de Jerusalén, la entrada más antigua de las murallas que rodean la Ciudad Vieja.

"¡Buenas noches a todos!", escribió, junto a las banderas de Brasil e Israel.

Bolsonaro viajó en 2016 a Israel para ser bautizado en el río Jordán, de gran simbolismo para los cristianos evangélicos, de quienes consiguió su apoyo para las elecciones presidenciales que ganó frente a Fernando Haddad.

En su página Facebook aún puede verse un video de ese viaje.

Poco después del tuit de Bolsonaro, su hijo Eduardo destacó en la red social que "por primera vez Brasil votó a favor de Israel en contra de los grupos terroristas", en referencia a la votación en la Asamblea General de la ONU para la condena del grupo Hamás que fue finalmente rechazada al no lograr la mayoría de dos tercios de los votos.

La resolución propuesta por la embajadora estadounidense ante la ONU Nikki Haley por primera vez buscaba una critica formal a las acciones del movimiento islamista palestino "por lanzar repetidamente cohetes hacia Israel y por incitar a la violencia, poniendo a los civiles en riesgo".

El texto estadounidense recibió más votos a favor que en contra (87 frente a 58, con 32 abstenciones) y sólo el requisito de una mayoría de dos tercios pedido por los países árabes impidió que fuera aprobado. Además, logró más respaldo que nunca en un asunto en el que EEUU está tradicionalmente muy aislado dentro de Naciones Unidas.

Lo cierto es que profundizar los lazos con Israel es una de las prioridades principales del gobierno de Bolsonaro.

En ese sentido, el presidente electo prometió durante la campaña electoral y después de vencer las elecciones presidenciales que cambiará de Tel Aviv a Jerusalén la embajada brasileña en Israel, siguiendo los pasos del presidente estadounidense, Donald Trump, y de otros países.

De confirmarse el traslado de la embajada, la decisión supondría un ruptura con respecto a la tradición diplomática mantenida durante años por Brasil en el conflicto entre Israel y Palestina. Brasil mantiene relaciones diplomáticas con Israel desde 1949 y reconoció el Estado de Palestina en 2010.

Bolsonaro también se ha reunido dos veces con el embajador israelí en Brasil, Yossi Shelley, desde que fue elegido en las urnas.

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu confirmó la semana pasada que asistirá a la investidura Bolsonaro el próximo 1 de enero en Brasilia. Es la primera autoridad internacional en confirmar su presencia en la toma de posesión como jefe de Estado del ex capitán del ejército.