Lilian Arce, una correntina de 58 años que representa a Formosa, donde reside desde hace 27 años, subió al tercer lugar del podio en la categoría Master Mayores de 50 de la competencia de culturismo Arnold Classic que se llevó a cabo a fines de abril en San Pablo, Brasil. Una actividad que comenzó como hobby hoy es más que nunca parte de su cotidianeidad.

Arce es profesora en Educación Física y personal trainer. Comenzó con el culturismo a los 24 años como pasatiempo, pero recién hace siete años empezó a competir en el más alto nivel. Hoy en día forma parte de una federación internacional que le permite justamente viajar a cualquier torneo que se realice en el mundo.

En contacto con La Mañana comentó que comenzó a participar porque le gustó la competencia: “De ahí que miraba las revistas de las grandes participantes de las Miss Olympia”, explicó, lo que la llevó a estar en varios torneos de carácter internacional.

En el 2015 dijo presente en un certamen de iguales características en Río de Janeiro, en el 2017 lo hizo en el Sudamericano que tuvo lugar en nuestro país, llegando en ambas competencias a las semifinales.

Mientras que en el 2018 volvió al Arnold Classic, donde nuevamente fue semifinalista; en tanto que en febrero del 2019 pasó por Medellín (Colombia), donde fue considerada Top Five al ocupar la cuarta ubicación. Ese mismo año estuvo en Las Vegas donde nuevamente llegó a las semis.

Después llegó la pandemia, pero no tuvo problemas para adecuarse a las nuevas reglas, no bajó los brazos y así llegó a terminar de buena manera en otro paso por Brasil.

“Ahora me preparo para ir a Colombia en julio”, adelantó.

Comentó que uno de sus sponsors es su esposo, quien la acompaña a todos lados, sin dejar pasar la ayuda que recibe de otras personas y que también son importantes, como la Dra. Verónica Dorrego, que “me ayuda con la parte médica y estética”, y la Dra. Pastor, que “me facilita el material para entrenar; además de Energym que me sponsorea”.

Lo suyo merece sin dudas ser destacado, ya que sus logros son fruto de su constancia y entrega diaria.